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RESTAURACIÓN Y MEJORA DE LOS ECOSISTEMAS LIGADOS AL CULTIVO DEL TOMATE.

Nestlé, en colaboración con Conesa y la Fundación Global Nature, está llevando a cabo un ambicioso programa para mitigar el impacto de la producción agrícola del tomate de industria. Para ello, se está desarrollando un código de aprovisionamiento sostenible que garantizará la aplicación de buenas prácticas agrícolas en aspectos como el aporte de nutrientes, la aplicación de fitosanitarios, el uso del agua, el cambio climático o la biodiversidad. El agua y la biodiversidad son dos aspectos clave en el área de producción. Extremadura es una de las regiones españolas más ricas en biodiversidad y los cultivos de tomate dependen del agua procedente del río Guadiana.