Este año he aterrizado en una montaña desierta, encontrado una pequeña casita y, desde allí, bajado del cielo una cinta roja para vosotros: «Todos los ingredientes que condimentan la Navidad, os los envío en esta caja, llena de mis mejores deseos…» Feliz Nat-vidad! El 2017 será mucho… MUCHO MEJOR!